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Valores que no son de este mundo.


En la medida en que yo me mantenga centrado en la perfección del Hombre Nuevo, de mi Verdadera Naturaleza como Primera Persona del singular, las múltiples imperfecciones del hombre viejo serán mitigadas.
En la medida en que yo viva desde los valores de este Nuevo Hombre - amor incondicional, ningún poder sobre los demás, nunca darle la espalda a nadie, humildad, y así sucesivamente - en esa misma medida, los valores contrastantes de ese viejo hombre se harán menos y menos pesados, y menos serios y problemáticos, y más y más afables y realistas y saludables.
En una palabra, seré más natural.
Todo lo que se me enseñó a creer acerca de lo que realmente soy es completamente al revés y equivocado.


Douglas Harding.


Leído en:  Presencia Conciente.




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