En la batalla de mi vida: Lucharé para obtener mi paz. Pelearé por conquistar mi amor. Si herí injustamente, haré que me perdonen. Si alguien que quiero se aleja: lo volveré a acercar a mí. Si he perdido la fe. la buscaré y la encontraré. Trabajaré para ir conociendo la Verdad. Me ganaré día a día la esperanza. Y si quiero alegría, la pelearé sin tregua en la batalla. No dejaré que nada, ni nadie, pueda oscurecer mi luz. Pido al poder: Que me sostenga en mis caídas amargas. Que me ayude a comprender la verdad en mi vida. Que me ayude a encontrar a los seres que amo. Porque no espero que me den, sino ganármelo. Y si es necesario, aprenderé a pedir perdón. Y si es justo, sabré morir por aquello que quiero. Si lees con atención las dos Oraciones, te darás cuenta de que cada una de las frases, en cada poesía, corresponde a la misma frase en la otra. Sólo que en la primera la está diciendo un Ser Acusador, que no llega a entender que lo que le pasa tiene su origen en sí mismo y por lo tanto...