Después del invierno viene el
renacer de la primavera, y en ella recordemos el don de la audacia. La pequeña
planta que brota debe confiar en que encontrará la energía vital del sol en el
momento preciso. Allí, en el suelo oscuro, la semilla no puede ver aún la luz
del sol, pero confía en la urgencia de empujar hacia arriba. Para ser audaces
debemos actuar.
La práctica de la audacia requiere que renunciemos a nuestro interminable rumiar acerca de qué sucederá si actuamos, y en vez de eso solo sigamos nuestro instinto, como la bellota que se estira hacia la luz del sol.
¿Qué es aquello que anhelas hacer? ¿Tomar vacaciones, cambiar de carrera? ¿Quizás encontrar más minutos en el día? Muchos de nosotros nos hemos encontrado anhelando un cambio y lo que hace la diferencia entre desear unos minutos más o un cambio de carrera, no es más que la audacia de decir sí, comenzar a avanzar y ver qué nos traerá ese movimiento.
El chamán vive audazmente en la medida en que se atreve una y otra vez a actuar de modos distintos. Ahora, cuando nuevamente el sol permanece por más tiempo en el cielo, es el momento de plantar las semillas de nuestra intención, permitiéndoles explotar de la oscuridad e ir hacia la luz. Vivimos en una época de grandes desafíos que requieren respuestas audaces, auténticas y creativas.
Digan sí a aquello que anhelan, y actúen audazmente.
La práctica de la audacia requiere que renunciemos a nuestro interminable rumiar acerca de qué sucederá si actuamos, y en vez de eso solo sigamos nuestro instinto, como la bellota que se estira hacia la luz del sol.
¿Qué es aquello que anhelas hacer? ¿Tomar vacaciones, cambiar de carrera? ¿Quizás encontrar más minutos en el día? Muchos de nosotros nos hemos encontrado anhelando un cambio y lo que hace la diferencia entre desear unos minutos más o un cambio de carrera, no es más que la audacia de decir sí, comenzar a avanzar y ver qué nos traerá ese movimiento.
El chamán vive audazmente en la medida en que se atreve una y otra vez a actuar de modos distintos. Ahora, cuando nuevamente el sol permanece por más tiempo en el cielo, es el momento de plantar las semillas de nuestra intención, permitiéndoles explotar de la oscuridad e ir hacia la luz. Vivimos en una época de grandes desafíos que requieren respuestas audaces, auténticas y creativas.
Digan sí a aquello que anhelan, y actúen audazmente.
Alberto Villoldo.
¡Hola!
ResponderEliminarAntes que nada quería decirte que acabo de conocer este blog de casualidad, a través de otro blog, pero... ¡qué preciosa casualidad!
Me ha encantado descubrirte, me encanta el diseño, el título del blog, las imágenes... Pero sobre todo, me encanta cómo escribes. Muy buena entrada.
Ha sido un placer descubrir este maravilloso rinconcito.
¡Un abrazo, que seas muy feliz! ♥
Te dejo aquí el enlace a mi blog por si quieres verlo, pero no sientas ninguna obligación (de hecho, con haber pasado por aquí yo ya estoy encantada de la vida).
http://misspoessia.blogspot.com.es/
Es una buena entrada que da ánimos para seguir adelante con fuerza, con valentía. Consigues que, de alguna forma, se despierte algo, una especie de motor invisible para continuar. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarSi quieres y tienes tiempo, puedes pasarte por mi blog. Trata especialmente sobre el amor, pero también hay textos sobre cómo debemos aprovechar los momentos, y alguna que otra crítica. Espero que te guste.
http://improvisatuvida.blogspot.com.es/
¡Un beso!
Excelente mensaje, hace que uno reflexione sobre la importancia de tomar decisiones aun cuando tememos a las consecuencias.
ResponderEliminarTe invito a pasarte por mi blog
¡Saludos y felices fiestas!
En ello estamos, allí está la semillita bien abrigada...de momento arraiga temerosa, pero se que con mis cuidados llegará a brotar.
ResponderEliminarBesito volado.
¡GRACIAS! En un momento de cambio en mi vida en el que necesito creer en mí y en mi sueño y ser audaz.
ResponderEliminardivino
ResponderEliminar