Ir al contenido principal

Entregar mi poder.


¿Que es lo que dejé de ver en mí, que hoy tus mentiras son mi realidad?…
¿Que es lo que dejé de ver en las personas que me quieren -y que quiero- que hoy sus verdades me son indiferentes?…


No recuerdo cuando te di el poder de que manejes mi vida. No recuerdo cuando te adueñaste de mis sueños, de mis proyectos… Casi sin darme cuenta estoy sumergida en un recuerdo que me atormenta y trato de alejarte pero mi ser busca la manera de que estés siempre cerca.

Siento que vivo a través de tus ojos, olvidando por completo lo que realmente siente mi corazón. Pareciera que creerte me lastima menos que descubrir que eres tú la causa de mi dolor.

Trato de imaginar mi vida sin vos y lo que realmente veo es como se desmorona todo mi mundo; comienzo a entender que no sos vos lo que importa, sino todo aquello que proyecté a través de tu presencia.
Ver caer esos sueños duele más que no tenerte a mi lado.

En un esfuerzo por hacer racional esta emoción que me domina, entiendo que ese proyecto que siento perder, no es el mismo que el tuyo… que mi mente ha creado ese espacio en donde me siento segura, pero tus pasos se dirigen exactamente en la dirección contraria. Veo como te alejas y con eso mi vida -no mi vida real sino aquella que planifiqué equivocadamente a tu lado.

Quedaré vacía, eso es lo que siento. Esto es lo que domina hoy mi comportamiento tan irracional. Creo ser fuerte en tantos aspectos de mi vida y sin embargo una sola mirada tuya me hace olvidarme de mi misma.
¿Cuándo te di el poder de que manejes mi vida? ¿Cuándo fue que esto sucedió??!!

Necesito recuperar mi corazón, dejar de ponerlo en tus manos y de una vez tomar la decisión de agarrarlo bien fuerte entre las mías. Será un camino duro, donde el “tiempo” será mi mejor aliado; pero una vez que recupere mis sueños, todo se verá mucho más claro.

Ahora es el momento de hacerte a un lado. Lo siento, pero me di cuenta por fin que soy importante, que valgo la pena y que mi corazón merece una oportunidad para volver a latir. Buscaré nuevos horizontes, donde tú ya no estarás. Y ese es mi futuro: comenzar a encontrarme, a quererme y decidir de una vez ser feliz!

Nadie más que nosotros mismos tiene el poder de tomar las decisiones que nos llevan a la felicidad. Somos dueños de nuestra vida, incluyendo nuestros sentimientos.
Nunca dejemos que alguien más defina nuestro futuro. Nunca entregues tu poder.

Por Luz Braveros.

Gracias Nelson !!!


Comentarios

Entradas populares de este blog

Ayúdame a mirar...

“Diego no conocía la mar. El padre, Santiago Kovadloff, lo llevó a descubrirla. Viajaron al sur. Ella, la mar, estaba más allá de los altos médanos, esperando. Cuando el niño y su padre alcanzaron por fin aquellas cumbres de arena, después de mucho caminar, la mar estalló ante sus ojos. Y fue tanta la inmensidad del mar, y tanto su fulgor, que el niño quedó mudo de hermosura. Y cuando al fin consiguió hablar, temblando, tartamudeando, pidió al padre: "¡Ayúdame a mirar!" ( Eduardo Galeano.) La petición del niño ante la sorpresa azul del inmenso mar es la más bella expresión de lo que hombres y mujeres podemos hacer unos por otros en la búsqueda permanente que marca nuestra existencia. ¡Ayúdame a mirar! Tú no puedes mirar por mí, no puedes obligarme a mirar, no puedes hacer que yo vea lo que tú ves, no puedes forzarme, no puedes prestarme tus ojos, tus ideas, tu experiencia. Pero puedes ayudarme. Ya me has ayudado con llevarme al sur, con atravesar la arena conmigo, con pone...

Decir lo que se siente...

Decir lo que se siente exactamente como se siente. Claramente, si es claro, oscuramente si es oscuro; confusamente si es confuso. Fernando Pessoa.

Citas de "Relatos de poder".

* La confianza del guerrero no es la confianza del hombre corriente. El hombre corriente busca la certeza en los ojos del espectador y llama a eso confianza en si mismo. El guerrero busca la impe­cabilidad en sus propios ojos y llama a eso humil­dad. El hombre corriente está enganchado a sus semejantes, mientras que el guerrero sólo está enganchado al infinito. * Hay montones de cosas que un guerrero puede hacer en un determinado momento y que no habría podido hacer años antes. Esas cosas no cambiaron; lo que cambió fue su idea de sí mismo. * El único camino posible para un guerrero es actuar consistentemente y sin reservas. En un momento dado, sabe lo suficiente del camino del gue­rrero como para actuar en consecuencia, pero sus viejos hábitos y rutinas pueden interponerse en su camino. * Para que un guerrero tenga éxito en cualquier empresa, el éxito debe llegar suavemente; con mucho esfuerzo, pero sin tensión ni obsesiones. * Es el diálogo interno lo que ata a l...