Ir al contenido principal

Todo está bien si ...


Todo está bien si usted se entrega al Poder Superior. Ese Poder cala profundamente en sus cosas. Sólo en la medida en que usted piense que es quien efectúa el trabajo está obligado a cosechar los frutos de sus acciones. Por otra parte, si usted se entrega y reconoce a su yo individual sólo como una herramienta del Poder Superior, ese Poder se hará cargo de sus cosas junto con los frutos de las acciones. Estas ya no lo afectan y el trabajo prosigue sin obstáculos. El esquema de las cosas no se altera ya sea que usted reconozca al Poder o no. Sólo hay un cambio de actitud. ¿Por qué usted ha de llevar su carga sobre la cabeza cuando viaja en tren? El tren lo lleva a usted y a su carga, ya sea que ésta la tenga usted sobre la cabeza o la deje en el piso del tren. Llevándola en la cabeza no disminuye la carga del tren sino que sólo se esfuerza innecesariamente. Es similar el sentido de la ejecución de la acción por parte de los individuos que están en el mundo.


Sri Ramana Maharshi.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Ayúdame a mirar...

“Diego no conocía la mar. El padre, Santiago Kovadloff, lo llevó a descubrirla. Viajaron al sur. Ella, la mar, estaba más allá de los altos médanos, esperando. Cuando el niño y su padre alcanzaron por fin aquellas cumbres de arena, después de mucho caminar, la mar estalló ante sus ojos. Y fue tanta la inmensidad del mar, y tanto su fulgor, que el niño quedó mudo de hermosura. Y cuando al fin consiguió hablar, temblando, tartamudeando, pidió al padre: "¡Ayúdame a mirar!" ( Eduardo Galeano.) La petición del niño ante la sorpresa azul del inmenso mar es la más bella expresión de lo que hombres y mujeres podemos hacer unos por otros en la búsqueda permanente que marca nuestra existencia. ¡Ayúdame a mirar! Tú no puedes mirar por mí, no puedes obligarme a mirar, no puedes hacer que yo vea lo que tú ves, no puedes forzarme, no puedes prestarme tus ojos, tus ideas, tu experiencia. Pero puedes ayudarme. Ya me has ayudado con llevarme al sur, con atravesar la arena conmigo, con pone

Dicen que antes de entrar en el mar...

“Dicen que antes de entrar en el mar, EL RIO tiembla de miedo... mira para atrás, para todo el día recorrido, para las cumbres y las montañas, para el largo y sinuoso camino que atravesó entre selvas y pueblos, y vé hacia adelante un océano tan extenso, que entrar en él es nada más que desaparecer para siempre. Pero no existe otra manera. El río no puede volver. Nadie puede volver. Volver es imposible en la existencia. El río precisa arriesgarse y entrar al océano. Solamente al entrar en él, el miedo desaparecerá, porque apenas en ese momento, sabrá que no se trata de desaparecer en él, sino volverse océano.” Khalil Gilbran.

Decir lo que se siente...

Decir lo que se siente exactamente como se siente. Claramente, si es claro, oscuramente si es oscuro; confusamente si es confuso. Fernando Pessoa.