Crece, sembrando entre los hombres tu cosecha de Dios.
Crece, a pesar de los muros del mundo.
Crece sin miedo a la soledad de tu estatura.
¡Crece dondequiera!
Porque somos hermanos, no desconocidos.
Somos tierra, no fronteras.
Somos raíces de Dios, no papeles de embajada.
Estamos unidos por el amor, no por el lucro.
Crece y haz crecer tu mundo, tu idea, tu proyecto, tu corazón.
Crece antes de que se desborde el río,
antes de que se seque el árbol y antes de que necesites un último recurso.
Crece, aunque te duelan las raíces.
Crece dentro de ti mismo.
Crece con luz de estrella.
Crece con vuelo de águila.
Crece imitando a Dios.
¡Y no dejes de crecer hasta que te le parezcas!
Mi corazón, que es alma.
a veces no tiene calma.
Mi corazón, que es hondura,
a veces no tiene anchura.
Y a la vida, que es mi ser,
Le falta saber crecer!!!
Zenaida Bacardí de Argamasilla.
Que hermoso es crecer aunque duelan las raíces. Me ha llegado. Un saludo Pao
ResponderEliminar