Conozco a un Maestro que:
Vive en el aquí y el ahora.
Come cuando tiene hambre.
Duerme cuando tiene sueño.
Sabe escuchar.
Sabe callar.
No juzga.
Muestra su alegría sin objeto permanentemente.
Siempre tiene ganas de servir al otro.
Es espontáneo como un niño.
Sabe poner límites a la invasión del propio espacio sin llegar a dañar al otro.
Expresa ternura sin condiciones.
No busca la venganza...
En definitiva: me encanta mi perro.
¡Guau!
Alex Rovira.
Comentarios
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A todo caminante que la vida trajo por aqui, le agradezco que deje su huella. Un abrazo!!!